*** Rodríguez Torres es un personaje que se cansó de meter preso y torturar a muchos líderes políticos de oposición y los estudiantiles que reclamaban libertad. Él fue quien creó el SEBIN y allí, en los sótanos, construyó los perversos calabozos conocidos como “La tumba” para encerrar y torturar opositores.
*** Ortega Díaz fue recibida en el campo opositor, casi como una heroína, donde hasta la ayudaron a salir del país con su marido, el diputado del PSUV Germán Ferrer. Esa pareja no es solo culpable de haber cohonestado todo tipo de perversidades contra líderes políticos, estudiantes, dirigentes sindicales, etc., sino también de impresionantes casos de corrupción
El Frente Amplio Venezuela Libre (FAVL) ha salido, con velocidad asombrosa, a defender del Mayor General del Ejército (r) Miguel Eduardo Rodríguez Torres, quién fuera fundador y director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN); y luego Ministro de Interior, Justicia y Paz; y, quien fuera detenido a las 4:00 de la tarde de este martes 13, cuando participaba en un acto político. El Frente Amplio opositor ha producido un comunicado donde categóricamente exige al régimen liberación “inmediata”. A juicio de la coalición opositora, Rodríguez Torres fue aprehendido por alienarse con la disidencia anti Maduro.
Con el cuentos de que hay que perdonarlos porque hoy están adversan al dictador Nicolás Maduro y, “que aquí cabemos todos”, muchos líderes de la extraviada oposición, cada vez que el régimen enfrenta a uno de los suyos, salen a darle cobijo y protección.
Primero lo hizo con la ex Fiscal General Luisa Ortega Díaz, olvidando todo el daño que hizo a la disidencia venezolana, inventando juicios para llenar de presos políticos las cárceles. Como premio por sus pronunciamientos contra su propio régimen, la Ortega Díaz fue recibida, casi como una heroína, por muchos dirigentes de la oposición que hasta la ayudaron a salir del país con su marido, el diputado del PSUV Germán Ferrer. Esa pareja no es solo culpable de haber cohonestado todo tipo de perversidades contra líderes políticos, estudiantes, dirigentes sindicales, etc., sino también de impresionantes casos de corrupción en el ejercicio del poder. Hoy en el exilio dorado donde viven, se dan vida y hasta tienen al supuesto periodista Alberto Rodríguez, productor independiente en Telemundo 51, quien le fabrica junto a otros tenebrosos personajes, aureolas de inocencia.
Ahora ocurre igual con el Mayor General del Ejército (r) Miguel Rodríguez Torres, un personaje que se cansó de meter preso y torturar a muchos líderes políticos y estudiantiles. Creó el SEBIN para ese fin y allí, en los sótanos, construyó los perversos calabozos conocidos como “La tumba”. Como escribió en una oportunidad la colega Ludmila Vinogradoff en el ABC de España: *_“La tumba”, siete celdas de tortura en el corazón de Caracas._* “La tumba” no es el nombre de una película de terror, pero podría serlo, por el horror al que se ven sometidos los estudiantes y presos políticos venezolanos *encerrados bajo condiciones infrahumanas* en reducidas celdas de dos por tres metros, sin ventanas ni baño, situadas en el nuevo edificio del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, SEBIN, que la policía política usa para torturar a los opositores. Esos sótanos son testigos de lo que Rodríguez Torres hizo contra muchos jóvenes estudiantes, entre ellos Lorent Saleh, Gabriel Valles y Gerardo Carrero, cuyo único delito fue protestar contra el régimen. Muy fresco está aún, 8 de mayo del 2014, el ensañamiento contra los estudiantes concentrados en un campamento de protesta, constituido por unas 350 carpas, que fue asentado por los muchachos frente a la sede de la ONU en Caracas. Ellos solo exigían la libertad de sus compañeros detenidos. Por órdenes expresa del Mayor General del Ejército (r) Miguel Eduardo Rodríguez Torres, funcionarios del SEBIN, aprovechando que todos los muchachos dormían aquella la madrugada, arrasaron con el sitio. En esa “heroica” acción de Rodríguez Torres hubo 243 jóvenes detenidos.
Entre la trasladado al SEBIN del Helicoide estaba Gerardo Carrero, quién un día inició una huelga de hambre en el SEBIN en protesta no solo por la injusta detención, sino también por fue inolvidable castigo, mejor dicho, por la tortura: “lo guindaron esposado de una reja, le forraron las muñecas con papel periódico (para evitar marcas) y lo golpearon con una tabla. Estuvo doce horas en esa posición, humillado y obligado por las circunstancias a orinarse encima de su propia ropa. Luego decidieron llevarlo a la sede del SEBIN en Plaza Venezuela. Bienvenido a La Tumba…”, escribió Leonardo Padrón el 08 de febrero de 2015 en un trabajo que tituló: “Cinco sótanos contra el sol”
El Frente Amplio opositor exigió la liberación “inmediata” del perverso chavista Miguel Rodríguez Torres, y para cubrir apariencias, también la de todos los presos políticos. Para el FAVL, la posición crítica asumida por el Mayor General Rodríguez Torres contra el régimen actual y la decisión de “no convalidar el fraude electoral en marcha para el próximo 20 de mayo”, así como su incorporación a este Frente, “evidencian la debilidad de quienes pretenden mostrarse fuertes, pero que en la realidad cada día se quedan más solos y sin pueblo”.
Sostienen que que es importante la cohesión entre ciudadanos “enfrentados en el pasado por sus ideales y convicciones, unificados hoy por el objetivo común de organizar y movilizar al pueblo venezolano para la conquista de la libertad y la superación de la crisis mediante verdaderas elecciones libres, justas y transparentes”, algo así como el proverbio según el cual “el enemigo de mi enemigo en mi amigo.”
Rodríguez Torres, separado del Gobierno de Maduro en 2015, anunció en febrero que la Contraloría General lo inhabilitó políticamente por un año, impidiéndole así participar en las elecciones presidenciales del 20 de mayo, una decisión que calificó entonces de “falso positivo” para sacarlo de la arena política.
El 02 de febrero Miguel Rodríguez Torres, ex ministro de Interior Justicia y Paz, aseguró que el gobierno ha buscado cualquier excusa para sacarlo de la política. A su juicio, le temen a los chavistas disidentes. “Han buscado cualquier manera de involucrarme en algo que sea un delito para sacarme del juego político y resulta que yo voy a seguir ejerciendo los derechos que la constitución me otorga”, dijo. Rodríguez Torres indicó que el gobierno teme a la migración de ex chavistas que buscan otras alternativas porque no están de acuerdo con el presidente Nicolás Maduro. “Maduro es fácilmente vencible en elecciones”, aseguró el ex ministro que hoy preso, es defendido por la oposición que olvida fácilmente sus actuaciones en funciones de poder. ¡Qué manguanga!
políticos las cárceles. Como premio por sus pronunciamientos contra su propio régimen, la Ortega Díaz fue recibida, casi como una heroína, por muchos dirigentes de la oposición que hasta la ayudaron a salir del país con su marido, el diputado del PSUV Germán Ferrer. Esa pareja no es solo culpable de haber cohonestado todo tipo de perversidades contra líderes políticos, estudiantes, dirigentes sindicales, etc., sino también de impresionantes casos de corrupción en el ejercicio del poder. Hoy en el exilio dorado donde viven, se dan vida y hasta tienen al supuesto periodista Alberto Rodríguez, productor independiente en Telemundo 51, quien le fabrica junto a otros tenebrosos personajes, aureolas de inocencia.
estudiantiles. Creó el SEBIN para ese fin y allí, en los sótanos, construyó los perversos calabozos conocidos como “La tumba”. Como escribió en una oportunidad la colega Ludmila Vinogradoff en el ABC de España: *_“La tumba”, siete celdas de tortura en el corazón de Caracas._* “La tumba” no es el nombre de una película de terror, pero podría serlo, por el horror al que se ven sometidos los estudiantes y presos políticos venezolanos *encerrados bajo condiciones infrahumanas* en reducidas celdas de dos por tres metros, sin ventanas ni baño, situadas en el nuevo edificio del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, SEBIN, que la policía política usa para torturar a los 
opositores. Esos sótanos son testigos de lo que Rodríguez Torres hizo contra muchos jóvenes estudiantes, entre ellos Lorent Saleh, Gabriel Valles y Gerardo Carrero, cuyo único delito fue protestar contra el régimen. Muy fresco está aún, 8 de mayo del 2014, el ensañamiento contra los estudiantes concentrados en un campamento de protesta, constituido por unas 350 carpas, que fue asentado por los muchachos frente a la sede de la ONU en Caracas. Ellos solo exigían la libertad de sus compañeros detenidos. Por órdenes expresa del Mayor General del Ejército (r) Miguel Eduardo Rodríguez Torres, funcionarios del SEBIN, aprovechando que todos los muchachos dormían aquella la madrugada, arrasaron con el sitio. En esa “heroica” acción de Rodríguez Torres hubo 243 jóvenes detenidos.
Rodríguez Torres, separado del Gobierno de Maduro en 2015, anunció en febrero que la Contraloría General lo inhabilitó políticamente por un año, impidiéndole así participar en las elecciones presidenciales del 20 de mayo, una decisión que calificó entonces de “falso positivo” para sacarlo de la arena política.
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