Caín y Abel… y el sicariato de las FAES (Parte 1)

*** Funcionarios del Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (CPNB), adscritos a las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), cobraron 10 mil dólares a César Luis Barcia Valladares por asesinar a su medio hermano Juan Manuel Barcia Rodríguez y a la esposa de este, abogada Dora Delgado, quien se salvó de milagro

 

*** Esta historia comienza cuando César Luis Barcia contacta a unos funcionarios bandidos pertenecientes al FAES, y acuerda con ellos el asesinato de su hermano, el empresario Juan Manuel Barcia, como efectivamente ocurrió. El móvil: Celos y envidia

 

*** En estos momento se sabe que hay movimientos y gestiones corruptas en los órganos de la administración de justicia, para luego, aplacado el escándalo público, liberar a todos esos “angelitos” que participaron en el cruel asesinato de un hombre que dedicaba su vida al trabajo honrado

 

Recientemente, en una entrevista que le hicieron en Venevisión a Tarek William Saab, este dijo: “… la delincuencia uniformada es inmoral y más peligrosa que la delincuencia común, porque esta se sirve de las armas del Estado, se sirve de la insignia del Estado, se sirve de la logística que da el Estado para proteger a los ciudadanos, por tanto ellos merecen todo el peso de la ley….”

Citamos estas palabras del Fiscal General de la República Bolivariana de Venezuela, designado por la Asamblea Nacional Constituyente, para señalar que las Fuerzas de Acciones Especiales, perteneciente a la Policía Nacional Bolivariana, se han convertido en un órgano realmente tenebroso. No solo por las miles de ejecuciones extrajudiciales que aparecen asentadas en el célebre informe presentado el 04 de julio de 2019 a consideración de la Asamblea de las Naciones Unidas, por la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, sino además porque está suficientemente demostrado que muchos de los funcionarios de esa fuerza policial, provienen del mundo hamponil, por lo que luego aparecen con impresionantes prontuarios y, ya con ese uniforme, el arma de reglamento y la chapa en el bolsillo, han incurrido hasta en delitos de secuestro y sicariato.

En este trabajo nos vamos a referir a un caso concreto sobre esos abominables delitos a los que nos referimos, cometidos por funcionarios de esa temible organización que se conoce como FAES, quienes el lunes 09 de noviembre de 2020 a las 11:40 de la media noche se metieron a la empresa Plásticos Valencia, C.A, ubicada en el sector Naranjillo, calle el Cañón, galpón sin número, parroquia Guácara, municipio Guácara, estado Carabobo, de donde se llevaron secuestrado a su propietario, el empresario Juan Manuel Barcia Rodríguez (54), titular de la C.I N° 6.965.680; quién al día siguiente, es decir, el martes 10 de noviembre, apareció asesinado, con signos de tortura, en la carretera vieja Caracas-La Guaira, sector Malboro, parte alta, municipio Vargas, parroquia Carlos Soublette, estado La Guaira.

El empresario Juan Manuel Barcia Rodríguez, asesinado por encargo de su medio hermano

De la investigación realizada por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), tanto de Carabobo, como de La Guaira, se llegó a establecer que los autores materiales de este secuestro con homicidio, fueron funcionarios del Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (CPNB), adscritos a las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), quienes cobraron 10 mil dólares para hacer este trabajo. ¡De terror!

La confesión

Cuatro de los sicarios del FAES contratados por “Caín” Barcia

En la averiguación llevada a cabo por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, delegación Mariara del estado Carabobo, contenida en el expediente CICPC-K-20-0539-00071, (del cual este reportero ha podido tener acceso), por delitos contemplados en la Ley Especial Contra el Secuestro y la Extorsión, “por cuanto se tuvo conocimiento que en la ciudad de Caracas, en el mes de noviembre del presente año (2020), varios sujetos desconocidos para el momento, irrumpieron en la residencia de un comerciante, logrando llevarse al mismo en contra de su voluntad, de quién se desconoce su paradero hasta la presente fecha y hora, por lo que funcionarios de este cuerpo policial, adscritos a la División Nacional Contra Extorsión Y Secuestro, luego de realizar varios análisis de telefonía, lograron identificar a los sujetos que participaron en el hecho, quienes fueron aprehendidos, quedando identificados como BRIAN DANIEL GOYO GUERRERO, C.I N° 27.793.544; EMILIO ANTONIO CAVANIEL, C.I N° 27.692.820; y, DENNIS JOHAN CARDENAS DELGADO, C.I N° 26.946.846; quienes son funcionarios activos del Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (CPNB), adscritos a las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES). De igual manera los referidos sujetos luego de un exhaustivo interrogatorio, manifestaron  que ellos en compañía de otros sujetos de nombre YENSER GARCÍA Y DEIVYS EMILIO CARDENAS, quienes también son funcionarios activos del Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (CPNB), adscritos a las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), actualmente evadidos, participaron en otro hecho similar, ya que recibieron la cantidad de 10 MIL DÓLARES AMERICANOS, de parte de un ciudadano de nombre CÉSAR BARCIA, para que plagiaran a un comerciante en la ciudad de Guácara, estado Carabobo, en fecha 09/11/2020, en horas de la noche, quién posteriormente fue asesinado en la carretera nacional Caracas-La Guaira, en fecha 10/11/2020, en horas de la mañana, todo por un problema familiar, quienes se diputaban la propiedad de una empresa…”

Caín contrató a los sicarios

El “Caín” Luis Barcia Valladares contrató a los sicarios de las FAES para asesinar a su medio hermano

La historia que nos ocupa nos traslada al texto bíblico, donde en Génesis nos encontramos con el triste episodio del asesinato de Abel, por parte de su hermano Caín. En este caso la historia ha sido parecida, solo con la variante que el hermano menor, es quién decide la muerte del mayor y, no la ejecuta el mismo, sino que contrata a unos sicarios para que hagan el “trabajo”. Así pues, tenemos que César Luis Barcia contacta a unos funcionarios bandidos adscritos a las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) y acuerda con ellos la cantidad de 10 mil dólares americanos para que asesinaran a su hermano, el empresario Juan Manuel Barcia, como efectivamente ocurrió. El móvil: Celos y Envidia. César Luis pretendía, muerto su hermano Juan Manuel, apoderarse de la empresa que este manejaba. Con lo que jamás contó el Caín de esta historia, era que sus sicarios contratados al ser descubiertos y detenidos, lo iban a delatar, como pasó. Debemos destacar que en el contrato por el monto de 10.000 dólares, que César Barcia hizo con los funcionarios policiales, incluía que estos también debían “eliminar” a la abogada Dora Delgado, compañera de vida del empresario asesinado Barcia Rodríguez. ¡Ella se salvó de milagro! Eso originó un airado reclamo del autor intelectual del crimen a sus sicarios, quienes pretendieron cobrarle 3 mil dólares más por el “trabajito”. Hoy la abogada Delgado es quién levanta las banderas, exigiendo justicia por este abominable crimen.   

La ética y la moral

1539. Óleo sobre lienzo, 151 x 125 cm, del artista Michel Coxcie, quién eligió el momento inmediatamente posterior al crimen. Abel yace de espaldas con la quijada sobre su cuerpo, mientras desde el cielo Dios destierra a Caín, en cuyo rostro se refleja la desesperación. Al fondo aparecen dos fuegos con las dos ofrendas. El de Abel, favorable a los ojos de Dios, es más grande, pues los bienes ofrecidos eran los mejores que poseía, al contrario que los pobres bienes ofrendados por Caín. El cuadro denota la influencia de la pintura italiana en el arte de Coxcie, especialmente en la robustez del cuerpo de Abel, directamente inspirado en la figura de Cristo del Juicio Final de Miguel Ángel en la Capilla Sixtina

Realmente en el mundo se producen hechos criminales que conmueven profundamente a la sociedad. Eso ocurre porque esos crímenes rompen todos los códigos y esquemas morales con los que estamos acostumbrados a vivir los seres humanos, y que son el resultado de los muchos siglos por los que ha tenido que transitar la humanidad, hasta lograr afianzar esos principios éticos y morales. La historia, relatada en Génesis,​ afirma que Abel se dedicaba a pastorear ovejas y su hermano mayor se dedicaba a la agricultura. Caín hizo una ofrenda de frutas y verduras mientras tanto Abel sacrificó los primogénitos de sus ovejas. A Dios desagradó la ofrenda de Caín y aceptó la de Abel. Caín, el hijo de Adán y Eva, lleno de celos y envidia, se enfureció con Abel, su hermano menor y decidió matarlo. Abel fue golpeado hasta la muerte con una quijada de animal. Dios le había advertido a Caín que su cólera podía llevarlo a cometer un pecado grave. “El pecado te está acechando como fiera que te codicia, a quien tienes que dominar”, le dijo;  pero Caín no le hizo caso. ‘Atacó a su hermano y lo mató.’ (Génesis 4:3-8.) El relato pasa a mostrar que el Creador lo castigó por ese asesinato (Génesis 4:9-11). Todos tenemos alrededor de nosotros estos malos sentimientos de celos y  envidia. El texto bíblico nos dice que estos sentimientos son una amenaza y que Dios nos pide que lo dominemos. Estos sentimiento es una fiera pronta a devorarnos. La envidia corroe el alma. Un versículo de los Proverbios dice que la envidia es como la caries de los huesos.

Hoy el contratante y los sicarios están tras rejas, sin embargo se sabe que hay movimientos y gestiones corruptas en los órganos de la administración de justicia del Estado Carabobo, para, aplacado el escándalo público, liberar a todos esos “angelitos” que participaron en el cruel asesinato de un hombre que dedicaba su vida al trabajo honrado. Arriba está Dios, escrutando todas nuestras acciones y, de su justicia no nos escaparemos ninguno.

The story will be continue

 

José Rafael Ramírez
Periodista, CNP 3.141

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