Después de la ejecución de Oscar Pérez, en el CICPC la procesión va por dentro

*** Cuando el lunes 15 de enero el mundo entero observaba en vivo y en directo que la intención del régimen era asesinar a Oscar Pérez y a sus acompañantes, el comisario Douglas Rico, director del CICPC, fue incapaz de llamar al presidente o al ministro para pedirle servir de mediador en la entrega de los acorralados, entre ellos su subalterno. Era lo menos que podía hacer, pero no lo hizo. Dejo que los masacraran y eso no debe dejarlo dormir

Un buen número de comisarios, inspectores y detectives del CICPC coinciden en calificar de extraordinario funcionario a quién fuera su compañero. Sostienen que además de eso, era un excelente amigo, solidario; sin embargo frente a su atroz muerte, ni una nota de duelo. En la cuenta e Twitter @DouglasRicoVzla, de su director, comisario Douglas Rico pareciera que la masacre donde cayó muerto este funcionario del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) no existió. Cuando el lunes 15 de enero el mundo entero observaba en vivo y en directo que la intención del régimen era asesinar a Oscar Pérez y a sus acompañantes, el comisario Douglas Rico, director del CICPC, fue incapaz de llamar al presidente o al ministro para pedirle servir de mediador en la entrega de los acorralados, entre ellos su subalterno. Era lo menos que podía hacer, pero no lo hizo. Dejo que los masacraran y eso no debe dejarlo dormir.

Desde la mañana del pasado lunes 15 de enero, cuando luego de ser delatado el régimen localizó en El Junquito al piloto e Inspector de la Policía Judicial, Oscar Pérez, había una inquietud generalizada en el CICPC. Podríamos decir que más de un 70 por ciento de los funcionarios hicieron correr en las redes su angustia por la suerte de su compañero en desgracia. Muchos colocaron en sus perfiles WhatsApp una foto de Oscar Pérez. Ellos informaban que al CICPC lo excluyeron del operativo porque sabían que no dejarían matar a su compañero.

Frente a esta rebelión silenciosa la Directiva del CICPC en vez de alzar su voz para impedir el ajusticiamiento del Inspector y piloto Oscar Pérez, no solo guardó silencio, sino que produjo la siguiente orden: “Jefes de Delegaciones les insto a que sus jefes de Sub Delegaciones monitoreen redes sociales, perfiles y Estados WhatsApp de los funcionarios adscritos a sus oficinas. De conseguir mensajes, imágenes que apoyen el terrorismo; Retirar dotación e informar de inmediato a esta Delegación de inmediato e informarle al REDIP”.

Cuando esa nota llegó a las diferentes delegaciones y subdelegaciones del CICPC, los funcionarios hacían correr por las redes lo siguiente: “Están desarmando a los funcionarios de diferentes despachos del CICPC, por no estar de acuerdo con el vil asesinato de nuestro compañero Oscar Pérez y por colocar en nuestros perfiles fotos del brillante funcionario. Aquí en este Cuerpo Policial existe mucho descontento, por la forma como efectuaron el procedimiento en contra de Oscar Pérez y el apoyo que existe de parte del gobierno a los colectivos, El CICPC es una familia que ahora más que nunca debe estar unida

 

También los adoloridos rebelados hicieron circular esta nota: “Adivinen de quien era yerno el delincuente Heyker Leobaldo Vásquez Ferrera, líder del colectivo Tres Raíces del 23 de Enero muerto en el operativo de  ajusticiamiento a Oscar Pérez. Nada menos y nada más que del Comisario General del CICPC, Bladimir Flores, hermano de la primera combatiente Cilia Flores. Es decir la hija de este policía estaba casada con semejante  choro. De verdad que esa familia Flores si que se las trae.”

 

 

Así son las cosa, como diría nuestro inolvidable colega Oscar Yanez

José Rafael Ramírez
Periodista, CNP 3.141
 

 

Sé el primero en comentar en «Después de la ejecución de Oscar Pérez, en el CICPC la procesión va por dentro»

Dejar un comentario

A %d blogueros les gusta esto: