La denominada “Constitución Bolivariana” fue producto de un grotesco cúmulo de violaciones del orden constitucional entonces vigente que no tiene validez alguna, y por el contrario representa una abyecta abominación institucional.
¡Constituyente ya!
Esa fue la oferta principal que desarrolló Hugo Chávez en su primera campaña y le dio un empaque atractivo siguiendo la técnica de la publicidad comercial de que el empaque es lo que vende. El empaque fue cambiarlo todo, dar una transformación total a la sociedad para acabar con la pobreza, no más niños de la calle, democracia verdadera dando poder protagónico al pueblo, persecución a muerte contra la corrupción…maravillas que se podrían adquirir a través de una Asamblea Nacional Constituyente que nos diera una nueva Constitución para sustituir a esa burguesa moribunda.
Pero aquel fue un regalo falso presentado con una envoltura envenenada, la constituyente de Chávez en verdad no la pensaba para lo que una constituyente sirve que es para hacer una constitución, su constituyente solo era la excusa, la herramienta que usaría para hacerse de todas las instituciones, para asumir un poder absoluto, uno que en realidad nos sumiría en esta pavorosa dictadura.
Gracias al deterioro que entonces venía sufriendo nuestra democracia por malos manejos de los partidos dominados por élites corruptas que se enquistaron en ellos abandonando el sentido de su existencia que era servir al pueblo, Chávez y sus propuestas ganaron las elecciones, y de inmediato pasó a la siguiente etapa de su siniestro plan, montar su constituyente con la cual desconoció toda la institucionalidad preexistente, Constitución incluida.
El 3 de agosto de 1998 se instaló la Asamblea Nacional Constituyente presidida por Luis Miquilena, eso fue en el Aula Magna de la UCV, y allí éste decretó la instauración del régimen que desde ahora tenemos montado en Miraflores. “Somos una Constituyente originaria” –gritó– cuando tres sentencias de la Corte Suprema de Justicia había explicado y dictaminado lo contrario, y agregó “Esto no es un cambio de un equipo de gobierno por otro, esto es un cambio de un sistema por otro sistema” y de inmediato emitió su primer Decreto: “La Constitución de 1961 y el resto del ordenamiento jurídico imperante mantendrán su vigencia en todo aquello que no colida o sea contradictorio con los actos jurídicos y demás decisiones de esta Asamblea Nacional Constituyente”
Así, violando la Constitución, desacatando tres sentencias de la Corte Suprema de Justicia comenzó este desastre, esta pesadilla donde el pueblo come de la basura, los generales son narcotraficantes y de filiación partidista, nos convertimos en colonia, los niños nacen en cajas de cartón, las mujeres paren en la calle, los estudiantes caen abatidos a balazos y otros yacen en una cárcel en los sótanos de la policía política y el exilio toma niveles nunca vistos.
Continuará…
Dr. Carlos Ramírez López
@CarlosRamirezL3
(Tomado de El Nacional: http://www.el-nacional.com/opinion/Constituyente-Constitucion-Inconstitucional_0_933506876.html )
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